Si te estas planteando hacer un crucero que pase principalmente por Noruega es importante que antes de nada tengas claras cuáles son sus mejores escalas o cuales son los mejores sitios para visitar. No todos los puertos de Noruega son igual de turísticos ni tienen los mismos atractivos En el artículo de hoy vas a conocer cuáles son las mejores escalas de los cruceros que pasan por Noruega.
Este artículo nos los envía una crucerista que ha realizado rutas de todo tipo, se trata de Isabel, del blog Mama de un prematuro, donde podéis encontrar más viajes para realizar con niños. Os dejo con ella y con su ruta por Noruega.
Cuáles son las mejores escalas de Noruega para visitar en crucero
BERGEN
Es una de las ciudades más características de Noruega. La primera imagen que nos viene a la cabeza son sus casitas de colores, junto al puerto, pero Bergen tiene mucho más y la escala que hace el barco en la ciudad es suficiente para ver lo más importante, siempre y cuando se vaya con la ruta preparada y las compras se dejen para el final.
Personalmente, opino que lo mejor es hacer la visita por nuestra cuenta que con cualquier de las excursiones que nos puede proponer la naviera. Y como consejo añadido a éste, es mejor bajar del barco antes que las excursiones, en caso contrario, tendremos que esperar a que bajen todos los grupos y eso nos hará perder tiempo para visitar la ciudad.
A continuación, os propongo una ruta que os permitirá visitar y conocer lo más importante de Bergen, sin prisas. Bergen no es muy grande y se puede recorrer bien a pie.
El recorrido empieza en la terminal de cruceros, que es distinta a la de Hurtigruten. Lo primero que nos encontramos según salimos del puerto es un recinto amurallado con una fortaleza (Hakonshallen y Rosenkratz-tarmet). Es visitable, aunque se paga entrada. Son un par de edificios medievales que se han ido ampliando en siglos posteriores.
Fortaleza de Bergen
Seguimos ruta hacia el centro de la ciudad y pasamos por Bryggen, las características casitas de colores. Aquí lo interesante es perderse por el barrio, son pequeñas calles, estrechas, llenas de comercios y pequeños restaurantes. Hay de todo lo imaginable: artesanía, productos navideños (aunque vayáis en verano), ropa de abrigo, joyerías,…
Bryggen – típicas casas junto al puerto
Seguimos ruta hacia el centro de la ciudad, bordeando el puerto. Llegamos a la catedral. No es una catedral al uso como estamos acostumbrados a verlas en España. Es un edificio sobrio y el interior apenas tiene decoración. Tampoco es excesivamente y podría pasar por una iglesia más.
Desde ahí cogemos la calle Domkirkegt que nos llevará hasta un gran parque, con un lago en el centro, bordeamos el parque para coger la calle Christies gate, una de las principales avenidas de la ciudad, que nos llevará hasta el jardín botánico de Bergen. Podemos desandar el camino bajando por la calle Olav Kyres gate. Estas dos calles nos permiten conocer la ciudad de Bergen más allá de lo meramente turístico.
Desde la calle Torgalmenningen, paralela a la anterior, llegamos al mercado de pescado. Es un buen momento para comer algo. Antes de sentaros a comer os aconsejo dar una vuelta por los puestos para que veáis que ofrecen, porque en Noruega no sólo comen salmón. Encontraréis bacalao, carne de reno o de caballo. También es posible que muchos de los que os atiendan en los puestos os hablen en español, porque la mayoría son estudiantes españoles que están estudiando allí su Erasmus y trabajando en el mercado de pescado se sacan un dinerito.
En el propio mercado de pescado hay mesas y bancos tipo picnic para comer y de paso descansar que ya llevamos una buena caminata.
En el mercado de pescado se puede adquirir comida para comer allí o para llevar, os lo envasan al vacío. En este sentido hay que tener en cuenta que es posible que la naviera no os deje acceder al barco con comida de fuera.
Para después de reponer fuerzas os propongo un viaje en funicular. El de Bergen es el único funicular de Noruega. Es accesible para todo el mundo y mientras haces el trayecto vas viendo unas vistas espectaculares. El recorrido es de unos diez minutos de duración y sale cada 15 minutos más o menos. Una vez que llegas a arriba, puedes dar un breve paseo puesto que es un espacio natural.
Vistas desde la estación de arriba del funicular de Bergen
Esta no es una parada habitual de los cruceros del norte, pero si uno de los cruceros internos por Noruega que van en busca de los fiordos. OS recomiendo que le echéis un vistazo a este artículo sobre Hellesylt y Geiranger
HONNISVAG – CABO NORTE
Desde esta pequeña ciudad al norte de Noruega se llega al Cabo Norte. Honnisvag es considerada la ciudad más septentrional de Europa continental y posiblemente del mundo. En este caso, sí que recomiendo la excursión que ofrece la naviera, puesto que para llegar al Cabo Norte el trayecto en autobús es largo.
Cuando llegamos al Cabo Norte, nos encontramos con un centro de visitantes. Pero antes de entrar al Centro de visitantes, junto al aparcamiento está el “Monumento de los Niños de la Tierra”, que simboliza la cooperación, la amistad, la esperanza y la alegría. Son unas formas circulares, como monedas gigantes. Junto a estos círculos, está la escultura “Madre e hijo”
Monumento de Los Niños – Cabo Norte
Centro de Visitantes – Cabo Norte
Escultura “Madre e Hijo” – Cabo Norte
Dentro del centro de visitantes, hay exposiciones, una tienda de recuerdos, una capilla, una oficina de correos, que tiene un sello personalizado para todos los envíos que se hagan desde esta oficina; y, por supuesto, un restaurante y cafetería
El Globo es, sin duda, la atracción más importante del Cabo. Es complicado conseguir una foto sin gente alrededor y casi hay que guardar turno para hacerse una foto allí. Cerca hay un acantilado y aunque está vallado hay que ir con cuidado.
Cabo Norte
Aunque se viaje en verano, en Noruega y más en estas latitudes es conveniente ir bien abrigado. Cuando yo estuve en Cabo Norte, la temperatura exterior era bajo cero.
TROMSO
Tromso es una de las ciudades más grandes de Noruega. Tromso, al igual que Bergen, es fácilmente accesible desde el barco. Se caracteriza por ser centro universitario. Además, tiene un acuario sobre la vida marina, llamado Polaria. Aunque es un centro dirigido a la investigación, es visitable. Está situado junto a uno de los muelles.
Tromso también tiene un tranvía que te sube hasta una de las colinas que rodean a la ciudad y desde donde se tienen unas vistas espectaculares, especialmente del sol de medianoche y de las auroras boreales. Sin embargo, es probable que la escala en Tromso no sea nocturna y no podamos ver ninguno de estos fenómenos. En cualquier caso, las vistas merecen la pena.
Mi recomendación es hacer primero la subida en el tranvía y después el paseo a pie por la ciudad. Es una ciudad encantadora. A lo largo de sus calles principales, veremos el Ayuntamiento, alguna estatua de animales de la zona (osos polares, focas,…), las típicas casitas nórdicas de madera…
Vista de Tromso desde el tranvía
Catedral del Ártico – Tromso
Es característica su catedral del Ártico, que destaca por su peculiar construcción y por una vidriera que llena de luz el interior.